A través de un proyecto de ley, el legislador Daniel Rivarola (Forja) propone implementar la ‘Hora Silenciosa’ en supermercados, hipermercados y locales mayoristas de Tierra del Fuego.  

La iniciativa argumenta que esto permitirá “brindar un mayor acompañamiento a nuestros ciudadanos que poseen alguna patología que les impida llevar adelante una tarea tan cotidiana como lo es realizar las compras diarias”.

En ese sentido, el proyecto de ley “tiene por objeto incorporar un mecanismo de asistencia e inclusión a las personas que padecen Trastornos Generalizados del Desarrollo (autismo, Rett, Asperger y Trastorno Generalizado del Desarrollo no Especificado) reconocidas por la ley provincial N°48”.

Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, el conjunto de patologías categorizadas dentro de los Trastornos Generalizados del Desarrollo (TGD) se caracterizarían por alteraciones generalizadas en diversas áreas del desarrollo del individuo, principalmente en tres dimensiones específicas: la interacción social, la comunicación (verbal y no verbal) y la presencia de intereses y actividades estereotipadas. El DSM-IV incluye dentro de esta categoría diagnóstica a los siguientes trastornos: Trastorno Autista, Trastorno de Rett, Trastorno Desintegrativo Infantil, Trastorno de Asperger y Trastorno Generalizado del Desarrollo No Especificado.

Puntualmente, el Trastorno en el Espectro Autista (TEA) produce una complicación profunda en la vida de los pacientes y sus familias. Se define como un síndrome por un espectro de dificultades en las habilidades de interacción social, en el lenguaje y la comunicación, con presencia de conductas repetitivas y restringidas con inflexibilidad y déficit en habilidades sociales. Se fundamenta en un procesamiento diferente de la información neuropsicológica, en las conexiones neuronales, en sus sinapsis y sus neurotransmisores.

“El objetivo del proyecto se focaliza en favorecer su derecho de inserción comunitaria -establecido en la ley N° 48- en miras de propiciar un ambiente más agradable, facilitando el momento de realizar tareas tan cotidianas como lo son las compras de víveres para los ciudadanos fueguinos con alteraciones en el procesamiento sensorial, con autismo u otro trastorno general de desarrollo, como también a las personas que sin autismo posean similares dificultades”, explica el proyecto.

Y agrega: “Creemos necesario implementar la denominada 'Hora Silenciosa' en todos los supermercados e hipermercados que cuenten con servicios de atención al público, como así también invitar a los municipios a que adhieran a esta iniciativa”.

Una 'Hora Silenciosa' consiste en que las autoridades determinen que durante un período de tiempo limitado de la semana se aplicarán medidas concretas para reducir los impactos sensoriales en los locales de abastecimiento de insumos que cuenten con atención al público.

“Algunos factores a tener en cuenta pueden ser: atenuar las luces o si es posible apagarlas para aprovechar la luz natural, apagar la radio o las comunicaciones por megafonía, disminuir el uso de pantallas digitales, desactivar pitidos y ruidos electrónicos de maquinarias, como así también la música ambiental, de manera tal que la realización de las compras de víveres se lleve a cabo en un agradable silencio. El objetivo es que todos los fueguinos que presenten alguna complicación que les impida realizar una tarea tan básica como es la compra de víveres puedan realizarla sin inconveniente en un entorno sin bullicio”, fundamenta la propuesta.

Asimismo, se detalla que “cualquier local comercial, independientemente de su dimensión, es un entorno lleno de estímulos sensoriales, como luces brillantes, sonidos y movimientos inesperados”, por lo que “muchas personas pueden experimentar un malestar intenso ante determinados sonidos, luces u otros estímulos que pueden pasar desapercibidos o no incomodar a las demás personas”.

“Pequeñas adaptaciones en los establecimientos radicados en la provincia puede resultar una forma muy acertada de incluirlas e integrarlas a la sociedad, ya que facilitaría el acceso a estos lugares que, por su naturaleza, pueden resultarles hostiles, difíciles de comprender y altamente estresantes”, señala la iniciativa.

El proyecto define como 'Hora Silenciosa' “a la merma significativa en la intensidad de las luces y los ruidos habituales en los locales comerciales durante un período mínimo de 120 minutos repartidos en dos jornadas de lunes a viernes, y de 60 minutos los días sábados y domingos”.

Esta iniciativa incluye a locales comerciales con una superficie cubierta igual o superior a los 150 metros cuadrados.

Además, el proyecto propone “ubicar, en un lugar visible, un cartel informativo donde consten, en forma clara y precisa, los días y horarios de la 'Hora Silenciosa' y toda otra información” de utilidad; así como establece la necesidad de “capacitar al personal para que pueda atender específicamente a personas autistas y otras con escasa tolerancia a los ruidos y luces intensas y para que puedan implementar y cumplir las acciones que deben llevarse a cabo durante la hora silenciosa”.