concejo deliberante
Proponen denominar calles de Río Grande con nombres de mujeres originarias selknam
Se trata de una iniciativa presentada por la concejal Cintia Susñar, a pedido de la agrupación "Khol Hol Naa”. Se debatirá en comisión a partir de la próxima semana y busca reconocer "a las mujeres que lucharon y siguen luchando por los derechos de los pueblos originarios".
Redacción Crítica Sur
A través de un proyecto de ordenanza, la concejal Cintia Susñar propone que se denomine a un grupo de calles de Río Grande con nombres de mujeres originarias selknam, acompañando así un pedido de la Agrupación "Khol Hol Naa”.
Entre los argumentos de la propuesta, Susñar sostiene que "la identidad de una ciudad se da valorizando a los orígenes", por lo que "en busca de fortalecer la cultura de la ciudad debemos reconocer, nombrar y dar a conocer los orígenes de nuestra cultura, con sus mujeres que fueron un pilar fundamental para toda organización de la sociedad",
En ese sentido, la edil considera que "debemos impulsar este tipo de acciones para que todos los representantes de nuestra ciudad tengan su merecido homenaje y reconocimiento", enfatizando que "las primeras mujeres fueron pioneras en nuestra tierra y es asi que debemos darle su merecido reconocimiento en pos de poner en valor su labor, su dedicación y sus miles de huellas tan fructíferas en nuestra cotidianeidad".
Asimismo, Susñar destacó a la Agrupación "Khol Hol Naa” asegurando que "trabaja incansablemente para lograr que sus valores y principios sean transferidos de generación en generación", por lo que "en los tiempos que corren es más que importante darle el lugar correspondiente a las mujeres que con su esfuerzo forjaron nuestra historia".
Son seis las arterias, actualmente sin nombre, que serán incluidas en el proyecto:
Calle s/n 418: Virginia Ángela Choquintel Napoleón
Calle s/n 438: Enriqueta Gastelumendi:
Calle s/n 439: Elvira Oray
Calle s/n 440: Rosario Imperial
Calle s/n 442: Herminia vera hilioyen
Calle s/n 443: Covadonga
El pedido de Khol Hol Naa
En la nota dirigida a Susñar, las integrantes de la Agrupación "Khol Hol Naa" (que en lengua selknam significa "Volver mujer") señalaron que se busca "consolidar el género femenino y por sobre todo nuestras raíces", asegurando que se pretende así homenajear "a todas nuestras hermanas que lucharon y aun siguen luchando por los derechos de los pueblos originarios".
"Es por eso que la idea siempre es mantener y rescatar la cultura selknam que por durante años fue excluida, queremos hacer valer respetuosamente nuestra historia y la de cada una de aquellas que sufrieron las peores aberraciones y maltratos", indicaron.
Por último, desde la entidad señalaron que "teniendo en cuenta el contexto que hoy se encuentra la ciudad al celebrar nuestro centenario queríamos pedir cordialmente designar calles, plazas, plazoletas, rotondas o cualquier otro espacio público a nuestras mujeres originarias".
"En el contexto actual la mujer fue ganando un espacio merecido logrando grandes avances importantísimos para nuestra sociedad, pero no podemos dejar pasar a nuestras hermanas que lucharon por nuestra tierra donde pasaron por los peores actos de violencia, de abuso y donde fueron totalmente vulnerables a la invasión", afirmaron.
¿Quiénes eran las mujeres selknam que se propone homenajear?
Virginia Ángela Choquintel Napoléon nació el 20 de julio de 1942 en la Misión Salesiana de Río Grande, donde fue pupila, realizó sus estudios básicos y vivió gran parte de su vida. Vio pasar el final de los pueblos originarios fueguinos, que para entonces contaban con unos pocos individuos sobrevivientes del genocidio selknam, el mestizaje y las enfermedades importadas por los blancos.
De su infancia tenía muy vagos recuerdos. Recordaba que su padre, Natalio Choquintel, quien vivía en una casa de la Misión Salesiana, la llevaba todas las tardes a andar a caballo. De su madre, Magdalena Saenes, no recordaba nada ya que había sucumbido a las enfermedades traídas por los occidentales, cuando ella tenía solamente 4 años. Virginia fallece el 2 de junio de 1999 en Río Grande a los 56 años.
Enriqueta Gastelumendi: “La India Varela” (1913-2004) nació un día de invierno, hija de madre selknam y padre vasco español. Ha sido mujer, madre, abuela y por sobre todo, una mujer que nos legó su arte, sus obras o como ella decía “sus trabajitos” que parecían tener vida, esa vida que transmitió de la identidad fueguina, plasmada en la lenga, se transmutaba de árbol caído a sangre de la tierra convertida en arte, tallando diferentes esculturas ej: el cristo ona entre tantas obras. Enriqueta fallece un 29 de agosto de 2004.
Elvira Oray: nació en Río Grande el 4 de agosto de 1934, hija de Adela Parra (selknam) y Ramón Oray perteneciente al linaje de Lola Kiepja. A los 6 años de edad la trajeron a ella y al grupo de mujeres de la familia a vivir a la Misión Salesiana, donde luego las separarían. Elvira sufrió todo tipo de violencia al ser vulnerable por el hecho de ser “huérfana “y originaria". A la mayoría de edad se casa con Sabino Salamanca y tienen 6 hijos. Se desempeñó trabajando en el frigorífico CAP y en el Centro Deportivo Municipal. Falleció el 7 de julio de 1987 en Río Grande.
Parte superior izq a der: Kiepja, Cecilia Oray en brazos; Carmen Venegas; Adela Parra en brazos y Anita Oray
Parte inferior: Elvira Oray, Ejej y Leonor Oray.
Rosario Imperial: selknam dueña de la primera pensión en Río Grande donde paraban gente de campo y “paisanos” selknam. Allí se reunían para hablar en su lengua. Falleció en 1970.
Herminia Vera Hilioyen: selknam hija de Matilde Hilioyen (selknam) y Antonio Vera. Nació el 27 de octubre de 1922 en la estancia Viamonte donde transitó su niñez, luego fue enviada a Punta Arenas a iniciar el nivel primario y vuelve a la Misión Salesiana donde le brindaron enseñanzas de la época. Se casó a los 21 años y tuvo 10 hijos. Herminia tuvo presente que atravesó épocas de discriminación, logrando que ocultaran sus raíces. Dueña de una calidez y amabilidad a cualquiera que dialogaba con ella. Herminia fallece el 5 julio 2014.
Covadonga: mujer del pueblo selknam conocida también como la "chonga". Fue llevada de su hábitat cuando tenía 10 años para realizar servidumbre, haciéndose querida por su simpatía y gentileza. Aprendió a leer y escribir, hablaba alemán y español. Se la veía muy desenvuelta y alegre antes de su repentina muerte (tuberculosis) en 1899. Si bien su muerte siempre fue dudosa por que se termina descubriendo que le enviaba informacion a un joven cacique tehuelche.