Tras más de una década, el Gobierno nacional no realizará la paritaria docente, de la que surge el porcentaje de referencia de aumento de sueldos de ese sector en el país. Este año, en cambio, esa negociación con los maestros la tendrá que encarar cada provincia con sus gremios.

Los gobernadores afirmaron ayer que aceptan este golpe de timón de la Casa Rosada, pero con una condición: que los fondos federales instaurados por ley que se destinan al salario de los educadores tengan un aumento “que acompañe” a la inflación prevista en el Presupuesto 2017, es decir el 17%.

Ayer a la tarde, con la confirmación del Gobierno nacional de que este año no habrá paritaria nacional docente, gobernadores y representantes de 18 de los 24 provincias se reunieron en el séptimo piso del Consejo Federal de Inversiones (CFI), en el barrio porteño de Retiro, donde acordaron tres cuestiones: silencio de radio sobre porcentajes; que los aumentos se realizarán sobre la base de la inflación pero también de la recaudación, y reclamar al Gobierno nacional el aumento de los montos de los fondos federales que integran el salario de los maestros.

Entre ellos, el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y el fondo compensatorio que reciben Corrientes, Misiones, San Juan, Formosa, La Rioja y Jujuy (unos 1.743 millones de pesos), provincias que no alcanzan a pagar con sus recursos el salario mínimo promedio establecido por el país.

Participaron los gobernadores Juan Manzur (Tucumán), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Juan Schiaretti (Córdoba), Domingo Peppo (Chaco), Hugo Passalacqua (Misiones), Gerardo Morales (Jujuy), Alberto Weretilneck (Río Negro), Omar Gutiérrez (Neuquén), Ricardo Colombi (Corrientes), Miguel Lifschitz (Santa Fe), Juan Manuel Urtubey (Salta), Lucía Corpacci (Catamarca), Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y Sergio Casas (La Rioja).

También, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, en lugar de Horacio Rodríguez Larreta; el ministro de Hacienda de Mendoza, Martín Kerchner, enviado por Alfredo Cornejo, y el diputado sanluiseño Luis Lusquiños, enviado por Alberto Rodríguez Saá.

Señales

“Vemos que la inflación va hacia la baja”, dijo Schiaretti, en sintonía con el Gobierno nacional y a modo de anticipo de la postura de sus colegas: que tomarán como base la pauta del 17% para negociar los aumentos a los docentes.

Junto a Schiaretti también oficiaron de voceros del encuentro el peronista Urtubey y el radical Morales, quien reforzó la advertencia del cordobés: “Los aumentos que están reclamando (los gremios) no son para nada los porcentajes que se manejan este año. Tienen más que ver con el año pasado”, dijo el mandatario oficialista.

La aclaración de Morales fue dirigida directamente a Sindicato de Docentes Bonaerenses (Suteba), que planteó esta semana la necesidad de un piso de negociación del 35%. O sea el doble de la pauta oficial de inflación.

El ministro mendocino Kerchner, en diálogo con este diario, se declaró a favor de la decisión de no realizar este año una paritaria nacional: “No es lo mismo el esquema salarial de Mendoza que el de Córdoba o el de Santiago del Estero. Cada provincia realizará la negociación de acuerdo con su situación”.

“La expectativa de inflación de este año es mucho menor que la que están pidiendo los gremios. Lo ideal a veces dista de lo real. ¿De qué sirve dar una paritaria del 35% si después no la vas a poder pagar”, dijo el enviado de Cornejo.

Urtubey, a su turno, fue el encargado de lanzar el mensaje a la Rosada: los gobernadores quieren que mejoren “las fuentes de financiamiento” que destina en ítems que componen el salario docente, es decir el Fonid y el compensatorio.

A pesar de este reclamo abierto, muchos gobernadores se mostraron desconfiados de que la Casa Rosada efectivamente atienda estas necesidades. “El problema acá es que el Gobierno nacional a (la bonaerense María Eugenia) Vidal sí le va a dar la plata para pagar los sueldos, pero al resto no", dijo uno de ellos, opositor, con tono de resignación, en estricto off the record.

En cambio, uno de los oficialistas largó con total despreocupación: “Yo no tengo problemas para pagar los sueldos. En todo caso, vendrá plata por coparticipación”.