En Argentina, los bosques submarinos del alga Macrocystis pyrifera, bosques de Kelp, o simplemente cachiyuyos, se extienden a lo largo del Atlántico Sur, desde Península Valdez hasta Tierra del Fuego incluyendo el canal Beagle y constituyen un valor inconmensurable para las distintas especies que residen en el Onashaga. 

Luego del acuerdo firmado entre Noruega, Argentina y la provincia de Tierra del Fuego buscando instalar la industria salmonera en las aguas del canal; se prendió una alarma desde distintos sectores locales que daban cuenta del peligro que correría toda la biodiversidad que se desarrolla en esas profundidades de la isla.

La bióloga Adriana Milena Cruz Jiménez realizó su tesis doctoral en la Universidad de La Plata, basada en los ensambles de peces asociados a los bosques de Kelps de M. pyrifera en el Canal Beagle. Su trabajo constituye uno de los pocos estudios de la relación entre los peces y el bosque de cachiyuyo, tomando en cuenta diferentes estratos del bosque, y también la influencia de las variables ambientales como la temperatura y salinidad de los lugares estudiados.

La investigación inició en el 2012 y duró 5 años donde la doctora se focalizó en estudiar dos estratos del bosque: la parte inferior (allí se ubica el grampón o estructura de fijación de la macro alga) y la parte media de la columna de agua donde están las frondes (similares a hojas).

Los métodos aplicados fueron la extracción del grampón del alga, la pesca con trasmallos (redes) y videos submarinos con carnada.

El estudio se llevó adelante en los bosques situados en las zonas de isla Dos Lomos, Isla Conejo y en la Isla Bridges, completando un total de 24 campañas de muestreos estacionales.

Los resultados más relevantes

Los bosques de M. pyrifera son fundamentales para la biodiversidad del Canal Beagle porque ofrecen refugio y alimento a un número muy importante de especies.

“Los grampones vienen a funcionar como especie de guardería, es un micro hábitat que alberga muchos de los adultos y también los juveniles de las especies que habitan el bosque como erizos, estrellas de mar, pepinos, cangrejos, bivalvos y peces” explica Milena.

La investigadora cuenta que “algo muy interesante es que los peces parecen utilizar de manera diferencial el bosque, entonces por ejemplo, la especie Patagonothoten tesellata parece estar más asociada al fondo, mientras que Paranotothenia magellanica pareciera estar más asociada a la columna de agua, sin embargo las dos especies frecuentan ambos estratos.”

Además “en los tres lugares estudiados hay abundancia y diversidad la cual varía de acuerdo al lugar y se ve influenciada por las variables ambientales y el bosque es utilizado principalmente para alimento y refugio”.

Por su parte, el trabajo realizado con videocámaras 3D con carnada representa el primero realizado en nuestro país, donde si bien “pudimos realizar el estudio y las mediciones, hay que pulir la técnica porque en comparación con las redes, las videocámaras permitieron encontrar menos especies e individuos”.

¿Qué ciclos cumplen los peces dentro del macroalga?

Diferentes estadios del ciclo de vida de los peces (huevos, larva, juvenil, adultos) pueden ser encontrados en el bosque y esto pone en manifiesto la enorme importancia de los bosques de M. pyrifera para la ictiofauna del Canal Beagle.

Milena cuenta que según Graham et al., 2008, estos bosques son uno de los ecosistemas más productivos y diversos del mundo y pone como ejemplo su propia tesis doctoral en la que halló en los grampones 95 taxones o grupos diferentes de individuos, dentro de los cuales 35 especies no habían sido reportadas anteriormente en este ecosistema en el Canal Beagle Argentino. “Los bosques de M. pyrifera en estas latitudes vienen a ser como los arrecifes de corales donde los peces pueden refugiarse, alimentarse y en algunos casos reproducirse. Al salir del bosque uno puede notar que inmediatamente disminuye la heterogeneidad de hábitat porque el fondo se convierte en arena en vez de tener las rocas, grampones, frondes y demás estructuras que aumentan la heterogeneidad del hábitat”.

Sobre el proyecto de instalación de Salmoneras en el canal Beagle

La especialista marca postura y opina que “es terrible y riesgoso introducir especies que no son nativas, además de lo que implica el uso de antibióticos y hormonas que se van a liberar directamente al canal y que no sabemos cómo van a impactar en las especies que recién estamos estudiando”.

“Es importante que la gente sepa la cantidad de vida que hay en el canal.  Las personas que vivimos aquí y disfrutamos de este lugar podemos ser como embajadores para poder decirles a otros `yo vengo de aquí, donde hay mucha diversidad y difundir la importancia de este lugar a nivel biológico. Hay que hablar de lo que hay acá, enseñarlo en las escuelas, hablar de por qué es tan importante el Canal y tomar conciencia de que todo lo que uno haga desde tirar basura o permitir la instalación de una salmonera va a influir en esas especies” reflexiona.