La denuncia la realizó la Confederación de Combatientes de Malvinas a través de su cuenta de Facebook, mencionando que diez acrílicos fueron quitados del cementerio Darwin por el jefe de la policía de Malvinas, Len McGill, y enviadas al Consejo de Gobierno para su análisis.

El ejecutivo local informó que serán confiscadas y "enviadas a desechar" porque son "de contenido político". Mientras que las otras siete serán ubicadas nuevamente donde estaban.

Los cuadros habían sido llevados por los veteranos Daniel Marini, Eduardo Conde, Guillermo Vélez y Ramón Robles el día en que hicieron su ceremonia con la bandera y el himno, acto que también generó resquemores entre los isleños.

Las inscripciones que son consideradas ofensivas decían: "en reconocimiento de quienes dieron su vida por la Patria en una causa justa", otra que honraba la memoria de los "camaradas caídos en la lucha por estas tierras", y una tercera en homenaje a "quienes regaron con su sangre estas tierras".