El genocidio fueguino: La masacre del pueblo Selk’nam
Hoy se cumplen 130 años de una masacre llevada a cabo por militares argentinos contra indígenas selk’nam. Este día, la Provincia recuerda el “Día del Aborigen Fueguino”. Además, por una ordenanza aprobada en octubre -que pasó totalmente desapercibida- se conmemora el “Día del Genocidio Selk’nam”, recordando las matanzas ocurridas entre fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX.
El de hoy no es un día menor. Se cumplen 130 años de una masacre contra indígenas selk’nam en manos de militares argentinos. Este día, la Provincia conmemora el “Día del Aborigen Fueguino”.
Pero en los últimos años, se alzaron voces que reclamaban que se recuerde el “Día del Genocidio Selk’nam” y no olvidar las matanzas ocurridas entre fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX.
De hecho, una ordenanza aprobada el 27 de octubre pasado y promulgada el 4 de noviembre -que pasó desapercibida- establece en el ámbito del Municipio de Río Grande el “Día del Genocidio Selknam”.
La propuesta del concejal Paulino Rossi fue aprobada y promulgada, pero no cobró mayor trascendencia que un mero acto administrativo, pese a la connotación histórica que tiene una definición de esas características.
En la argumentación de la ordenanza se expresa que “no puede permanecer ajeno a estos oscuros acontecimientos históricos de nuestra región y que merece igual tratamiento que la Conmemoración del 101º aniversario del Genocidio Armenio reconocido”, el que también fue reconocido por ordenanza.
Publicada en el último Boletín Oficial del Municipio, la norma reconoce finalmente el genocidio fueguino, recordando que “a fines del siglo XIX la isla Grande de Tierra del Fuego concitó el interés de grandes compañías ganaderas, por lo que la introducción de las estancias ovejeras creó fuertes conflictos entre los nativos y los colonos británicos, argentinos y chilenos, conflicto que adquirió ribetes de guerra de exterminio”.
Además, la ordenanza sostiene que “numerosos historiadores y cronistas de la época mencionan que las grandes compañías ovejeras llegaron a pagar una libra esterlina por cada Selknam muerto, lo que era confirmado presentando manos u orejas de las víctimas”.
Las tribus del norte fueron las primeras afectadas, iniciándose una oleada migratoria al extremo sur de la isla para escapar de las masacres; y como alternativa a la matanza “en 1890 el Gobierno chileno cedió la isla Dawson, en el estrecho de Magallanes, a sacerdotes salesianos que establecieron allí una misión dotada de amplios recursos económicos y los selknam que sobrevivieron al genocidio fueron virtualmente deportados a la isla, la que en un período de no más de veinte años cerró dejando un cementerio poblado de cruces”.
En 1887, el Boletín Salesiano estimaba unos 2.000 indígenas y más tarde, el padre Borgatello, contaría entre 2.000 y 3.000. Sin embargo, un estudio demográfico posterior, realizado por Esteban Lucas Bridges en 1899, registró la población selknam de la siguiente manera: “Al sur de río Grande habitaban 250 originarios repartidos en diversos puntos de la isla; en el norte, no integrados en la Misión de la Candelaria, vivían unos 20 más.
En ese mismo año hay bajo control de las misiones 163 originarios en la Candelaria y un máximo de 350 en la Isla Dawson.
Es decir que al finalizar el siglo XIX quedaban unos 783 Selknam en Tierra del Fuego.
La misma ordenanza recuerda la matanza de San Sebastián, el 25 de noviembre de 1886. “Es la primera masacre documentada y se conoce con detalle, cuándo, dónde y cómo ocurrió, fue cometida por un oficial argentino, en una misión de exploración, donde debía registrar su accionar en un diario de bitácora”.
El capitán Ramón Lista desembarcó en la playa de San Sebastián con el fin de explorar la región. “Ese mismo día se topa con una tribu Selknam, el capitán intenta tomarlos prisioneros, pero éstos se resisten. Lista ordena entonces a sus hombres abrir fuego y matan a 27 originarios del lugar”, recuerda.
Días después “los hombres de Lista se ensañan con un joven al que encontraron escondido tras unas rocas, armado tan solo con arco y flecha, al que asesinan de 28 balazos”.
Entre sus fundamentos, el proyecto aprobado también menciona el “envenenamiento de Springhill” donde mueren 500 selknam y la “masacre de Punta Alta” donde pierden la vida otros 25 originarios, ambos sucesos ocurrieron en la primera década del Siglo XX.