En declaraciones a FM del Pueblo, el ministro de Educación, Diego Romero, ratificó que desde el gobierno consideran hechos de “sabotaje” las roturas y destrozos que se denunciaron en escuelas de toda la provincia durante las últimas semanas.

“Dejar una hornalla abierta o romper a patadas una pared para entrar al lugar donde están las calderas es delincuencia, y en este caso es mucho más, es sabotaje, es poner en peligro a la gente”, opinó.

Romero sostuvo que “no está mal que la gente denuncie anónimamente cuando tiene alguna duda en relación al establecimiento, pero crean ciertos temores y miedo en las escuelas, en los niños, los padres y los docentes que llama la atención”.

Y agregó: “No podemos decir que no se va a romper una caldera o que no se va a quemar un tubo, porque los edificios escolares funcionan las 24 horas en Tierra del Fuego, pero se han hecho inversiones, y las escuelas son seguras”.

El Ministro aseguró que se incrementó la presencia policial en las escuelas “antes del receso escolar”, y que se analiza la instalación de cámaras en los establecimientos educativos, aunque no es un tema sencillo “porque hay menores”.  

“Hemos armado un protocolo que le voy a enviar hoy a todas las instituciones educativas para que lo tengan presente y reforzar el tema de la comunicación desde las escuelas hacia el área de Infraestructura”, comentó.