
El dueño del carrito El Ona es el “Vecino Solidario 2016”
El Rotary Club Río Grande le entregó el Premio al Vecino Solidario del año. El joven de 30 años es el responsable –junto a su familia- del Carrito de comidas “El Ona” que todos los últimos lunes de cada mes realiza la donación de su venta del día a una causa solidaria.
El Rotary Club Club Río Grande realizó un almuerzo de camaradería organizado especialmente para darle la bienvenida a los chicos de intercambio cultural y estudiantil que, en esta oportunidad, son dos adolescentes de Francia, uno de Alemania, otro de Bélgica y finalmente, uno de Finlandia.
En el encuentro, el Rotary Club Río Grande, entregó el Premio Vecino Solidario 2016, que este año quedó en manos de Facundo Varas, un joven de 30 años, quien es el responsable del carrito de comidas “El Ona”. La acción destacada y solidaria que realiza este vecino, junto a su familia, es la de donar un lunes de cada mes, todo lo recaudado ese día, a alguien que lo necesite.
El Presidente del Rotary Club Río Grande, Mario Ferreyra, destacó la acción que lleva adelante el vecino Facundo. “Si hubiese más gente como Facundo, el mundo sería un poquito más feliz”, dijo el Ingeniero Ferreyra.
Este lunes 25 de septiembre, la acción solidaria de “El Ona” será destinada a colaborar con Juan Ignacio, un niño riograndense que nació con Síndrome de Prune Belly e Insuficiencia Renal Crónica terminal, razón por la cual sus riñones no funcionan y ser trasplantado.
Con este reconocimiento ya son tres las oportunidades en que el Rotary realiza esta distinción. La primera vez fue para el Centro de Ayuda a Pacientes Oncológicos (CAPO) a través de Florentino y Gladys Maidana sus fundadores. En la segunda oportunidad, el reconocimiento fue para María González quien, desde hace muchos años, lleva adelante el Comedor de María. Estas dos instituciones están dentro de las que el Rotary colabora de manera regular.
Esta es la tercera vez que el Rotary entrega esta distinción: una mano extendida tallada en madera de lenga que es realizada por el artesano Javier Riveros, de la localidad de Tolhuin, que año tras año talla a mano esta obra para que sea entregada de manera única.
Luego de recibir la distinción, Facundo Varas destacó que “cuando uno hace algo bueno sin esperar nada a cambio, al final te terminan dando tantas cosas que supera las expectativas. Nosotros hacemos algo que es solamente una venta y te terminan dando una distinción por ser un vecino solidario. La verdad que no lo esperaba. Esto es muy grande para mí y, obviamente, estoy demasiado agradecido a la gente y nos alienta a seguir adelante con todo esto. Si podemos hacer más, será mejor. Estoy muy agradecido, de corazón”.
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