El Presidente de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), Federico Hellemeyer, se refirió al acuerdo que firmó ayer el sector empresario junto al Gobierno Nacional el Gobierno de Tierra del Fuego y la UOM en Buenos Aires

El referente de los empresarios fueguinos evitó opinar sobre las declaraciones del dirigente de la UOM Oscar Martínez, quien habló de una “extorsión” del Gobierno Nacional para que los trabajadores resignen aumentos salariales. “Yo no puedo pronunciarme sobre como Oscar interpreta la cuestión, yo creo que el foco se está poniendo demasiado en la concesión que hizo el sector trabajador que es muy significativa y contribuyó a lograr este entendimiento, pero me parece que acá ha habido concesiones que hicieron los cuatro sectores que participaron del acuerdo: el Gobierno Nacional, el Gobierno Provincial, el sector empresario y el sector sindical”, dijo esta mañana en Fm Aire Libre.

Sin embargo señaló que “con esto quiero quitarle mérito al sector sindical, pero todos los que tenemos que ver con Tierra del Fuego hace dos semanas prendimos una luz de alarma preocupantísima que tenía que ver con que se llevaran puestos a los impuestos internos y verdaderamente no hubiera habido a actividad productiva a partir de esta reforma”.

Hellemeyer aseguró que “a partir de eso empezaron en las negociaciones y todos cedieron, el Gobierno Nacional desde su idea original del proyecto, con las modificaciones que implementó más toda una serie de medidas tendientes a combatir el contrabando y recuperar volumen para Tierra del Fuego, mejorar la seguridad en las rutas, etc.”.

Respecto a al sector empresario dijo que se cedió “en todo lo que tiene que ver con la negociación con sus proveedores de logística y transporte para impactar en la estructura de costos, también trabajar en general en la cadena de valor en general, reducir el costo interno de manufactura por eficiencia de producción en los procesos internos de las empresas, con las consecuentes inversiones que esto significa y también  negociar con los proveedores internacionales en un contexto de mayor confianza para bajar el costo de las materias primas, etc.”.

“A parte de esos cuatro puntos concretos de mejores prácticas que van a impactar en la estructura de costos, no hay que olvidarse que acá está cambiando una situación tributaria en donde el impuesto interno que se le cobra al producto nacional va a cero, y el impuesto interno que se le cobra al impuesto importado cae de 17% a 10,5%, eso cambia drásticamente la ecuación económica de las empresas y ahí hay una resignación de rentabilidad muy sustancial”, agregó.

Según el titular de AFARTE “las empresas no solamente resignan hoy sino que van a resignar más con el correr de los años y  van a tener que volverse irremediablemente más competitivas porque en el año 2024 la diferencia de impuestos internos pasa a cero. Hay resignaciones muy significativas de las empresas, nada parece opacar la concesión que hace el sindicato y es muy significativa”.

A esto sumó que “la provincia puso su granito de arena manteniendo el nivel de tasa de verificación de procesos productivos que hay hoy en día en contra del proyecto de ley presentado que lo volvía a la tasa general. Esa concesión significa que la provincia deja sin efecto ese proyecto que había ingresado a la Legislatura y resigna recaudación”.

Hellemeyer precisó que “la paritaria actual está vigente hasta el 1 de junio de 2018 y esto también es importante decirlo, todos los derechos adquiridos en esa paritaria continúan vigentes y se van a aplicar, incluso  un incremento para junio de 2018 del 2%”.

“Yo no le quito merito a la resignación de la UOM pero todos los sectores resignamos algo, la alternativa que era tener un impuesto interno sin discriminar nacional de importado en cero el primero de enero, era impensable”, manifestó.

El referente empresarial aseguró que “esta era una hora acuciante en la cual todos los sectores que estamos involucrados tuvieron que poner para contribuir a la sostenibilidad de la actividad”.

Además recordó que “es de público conocimiento que el Gobierno quería llevar los impuestos internos a cero, no sé si nos aporta hacer una interpretación en el sentido de la extorsión, en todo caso que la haya hecho Oscar puede ser correcto,  yo no me puedo pronunciar sobre eso. Creo que la intención del Gobierno es bajar el precio de los productos, no creo que sea eliminarnos, lo que pasa es que comprometía necesariamente nuestra supervivencia”.

En este orden precisó que “es indudable que el Gobierno nos está colocando presión para ser más competitivos y eso significa intervenir toda la estructura de costos, y nos guste o no nos guste, los sueldos son parte de la estructura de costos”.

Sin embargo reiteró que “acá hay resignaciones de todos los sectores, la provincia con una situación fiscal difícil resigna recaudación, nosotros claramente estamos haciendo resignaciones de rentabilidad y tomando un montón de obligaciones que en muchos casos no dependen solo de nosotros”. “No hay una regla para medir quién puso más, pero me parece que todos los sectores han puesto”.

Respecto al impacto que tendrá el acuerdo sobre la economía fueguina, Hellemeyer expresó que “se sabe y se dice que el sueldo de los metalúrgicos es un poco la locomotora de los sueldos en Tierra del Fuego, claramente este acuerdo va a tener un impacto en la sociedad fueguina toda, con lo cual hay que ver cuál es la tesitura de los propietarios  a la hora de estimar el valor de sus locaciones o de los comportamientos dentro de la canasta básica, quizás todavía no tenemos una idea acabada del impacto que este acuerdo va a tener en la economía  fueguina toda”.

“Ciertamente la eliminación de la industria iba a tener un impacto funesto en la economía de la provincia, creo que esta es una alternativa que para nada es celebratoria pero que nos da un marco de certidumbre para seguir profundizando lo que veníamos discutiendo hace un montón de tiempo que tiene que ver con ser más competitivos y que los productos sean más baratos”, cerró.