El episodio ocurrió en horas de la madrugada del lunes, cuando un vecino llamó a la central policial de comunicaciones, para advertir que dos personas se encontraban con intenciones de efectuar una conexión clandestina de energía.

De inmediato, la policía se hizo presente en el lugar y advirtió en el lugar se encontraba una mujer con una bolsa reciclable que contenía un atornillador de mano y una llave francesa. Pero fue el hombre quien dijo ser el autor de la conexión eléctrica clandestina.

Al lugar llegó un empleado de guardia de la Dirección de Energía Provincial quien inspeccionó el lugar y encontró la unión irregular realizada con varias abrazaderas metálicas adheridas sobre el cableado eléctrico de uno de los postes de alumbrado público. En este orden indicó que efectivamente se efectuó una conexión clandestina, la cual fue perfectamente instalada al utilizar las denominadas “mordazas de conexión”.

Según el empelado de la DPE, estos elementos solo los posee la Entidad de suministro eléctrico, es decir que no son ofrecidos a la venta por parte de los locales comerciales de la zona.

En el sitio del hecho, la policía también encontró dos escalaras y en la base de una de ellas se pudo apreciar una cuerda de hilo trenzado utilizado para la extensión de los tramos. De igual modo, se halló en el lugar tierra removida producto de haberse realizado sobre el terreno una canaleta que contendría a los cables de la conexión clandestina.

Finalmente, luego de haberse realizado al Audiencia Única este martes 2 de mayo, en la que los testigos se negaron a declarar, el fiscal de turno, Doctor Daniel Curtale resolvió derivar la causa a pedido de las partes al Centro de Mediación del Distrito Judicial Sur (CEDEME) y a la vez elevarla a juicio al Tribunal Correccional del mencionado distrito, hasta tanto el Centro de Mediación decida intervenir en la misma con el fin de resolverla.