Afiliados al PAMI de Río Grande se reunieron hace pocos días en el Centro de Jubilados Aylin para lo que iba a ser la habitual entrega de bolsones alimentarios, pero el encuentro terminó siendo una puesta en común de los problemas que enfrentan en las últimas semanas con la obra social. Aseguran que el servicio está cortado, que no tienen médicos, y de esta manera tampoco acceso a los medicamentos.

Irma Castellano y María Ester Palacios, referentes del Centro de Jubilados “Aylin” con más de 160 afiliados, contaron en Fm Aire Libre sobre la situación de la obra social y adelantaron que esta mañana ocuparán las oficinas para exigir soluciones.

“La entrega de bolsones esta vez fue un libro de quejas abierto con páginas llenas porque la gente se quedó sin obra social y es muy triste”.

Castellano contó que “yo fui al neurólogo el viernes por la tarde y pague 500 pesos la consulta, no podemos pagar eso. Otro afiliado llevó a su padre a hacerse atender y le cobraron la consulta y los estudios que le tuvieron que hacer”.

Y señaló que “lo que está pasando es una locura, es insostenible. Esto viene de arrastre pero la última gota colmó la copa”.

De esta manera se están convocando los afiliados en la oficina de Espora porque quieren tomar el PAMI a la hora 10.00

“Los afiliados están muy enojados, porque a los viejos nos puede faltar cualquier cosa pero no nos puede faltar el médico que nos atienda”, afirmó la jubilada.

En este sentido remarcó que “es un derecho adquirido, no estamos pidiendo nada, nos descuentan todos lo meses, entonces queremos nuestro servicio”.

“La gente está mal, los sueldos son escasos, y tener que pagar 500 pesos un médico es mucho para nosotros”.

Además aseguró que “el tema se ha tapado, no se ha subsanado nada, ha venido de arrastre del año pasado con falta de diferentes servicios, ahora ni ambulancia tenemos. Perdimos todas las prestaciones médicas, hay que abonarlas directamente y para el ingreso que tenemos es una locura”.

En cuanto a las farmacias dijo que “funcionan, pero para que querés la farmacia si no tenés un médico que te recete, no tenemos forma de adquirir la medicación”.

Y cerró: “Nos quedamos sin médicos, veíamos que se iba deteriorando el servicio, pero uno siempre tiene una luz de esperanza, ahora es caótico desde los últimos diez días”.