Con la firma de Adolfo Saglio Zamudio, director nacional de Relaciones y Regulaciones de Trabajo, se dispuso “dar por iniciado un período de conciliación obligatoria por el plazo de 15 días retrotrayendo la situación a la existente con anterioridad al inicio del presente conflicto”.

De acuerdo a Clarín, se intima "a las entidades sindicales antes mencionadas y por su intermedio, a los trabajadores involucrados, a dejar sin efecto, durante el período indicado en el artículo anterior, toda medida de acción directa que estuviesen implementando y/o tuvieran previsto implementar, prestando servicios de manera normal y habitual".

Para este viernes, según datos del ministerio de Transporte, están programados 650 vuelos, que transportarán a unos 83.000 pasajeros. En Aerolíneas Argentinas ya habían estimado el costo de una posible medida de fuerza: una pérdida de al menos 8 millones de dólares por día.

Los gremios habían llamado a un cese de actividades después de que el Gobierno nacional anunciara la eliminación de precios mínimos para los pasajes de avión en vuelos de cabotaje, en el marco de un proceso de flexibilización de tarifas aéreas, como venían pidiendo las compañías low cost.

El documento lleva la firma de los pilotos de Aerolíneas, Latam y Andes (APLA), los de Austral (UALA), los mecánicos (APTA), el personal de tierra (APA) y el personal jerárquico (UPSA), además de otras dos entidades que agrupan a los aeronavegantes de Latam (Atepsa) y a un sector de los controladores de vuelo (Atepsa).

El único de los seis gremios que no se plegó a la medida es la Asociación de Aeronavegantes (AAA).